Luna Portnoi, artista visual, logró transportar sus obras a grandes escalas: intervino autos, aviones y bicicletas, entre otros objetos, a partir de que diferentes marcas la convocaran para eventos y desafíos. Autora de los libros para colorear Los sueños de Luna y La magia de Luna, actualmente se dedica al muralismo, brinda talleres de creatividad y produce obras más pequeñas para su tienda virtual.
• Además de artista plástica, sos diseñadora de indumentaria. ¿Cómo fue la transición hacia el mundo de las artes visuales?
Apenas me recibí me fui a trabajar a Londres, a un estudio textil. Fue una experiencia hermosa. Después tuve un emprendimiento, una marca de calzados, acá, en Buenos Aires. A los 27 años terminé ese proyecto, que era más comercial y empresarial, para dedicarme a pintar, que era algo más vinculado a la creatividad.
Todo lo que sucedió después fue maravilloso, porque todo se fue dando como para que me pudiera dedicar al arte profesionalmente: tuve el feedback de la gente, de las marcas, de las empresas. Esa transición fue magnífica porque me pude dedicar a lo que más amo en el mundo.
• ¿Cómo surgió tu interés por el universo de los mandalas? ¿Qué cosas y qué culturas te inspiran?
Me inspira estar en contacto con la naturaleza, la flora, la fauna. Observar los detalles mínimos de la naturaleza. Viajar. También la parte visual de algunas tribus ancestrales como los masái y los huicholes.
• ¿Sobre qué tipo de soportes pintás, y qué materiales usás?
He pintado sobre todo tipo de soportes imaginables: paredes, bastidores, hojas, avión, auto, y seguiré probando pintar e intervenir diferentes superficies que estén a mi alcance. Uso marcadores, látex, acrílicos, acuarelas.
• También brindás workshops y un “Taller de Formación Artística” para aquellos que quieran desarrollar su identidad creativa. ¿Qué técnicas enseñás?
Enseño todo tipo de técnicas, ahora por Zoom. Los talleres están orientados como un acompañamiento a los procesos creativos, para que los talleristas puedan conectar con su potencial creativo y formar su identidad artística. Hacemos meditaciones, y todo tipo de técnicas que uso como disparadores para que puedan entrar en profundos procesos de trabajo personal. Es un proceso holístico, integral, muy maravilloso. Las alumnas lo podrían contar mejor. Se producen cosas muy hermosas, es un espacio donde no hay juicios, donde el acompañamiento es 100% amoroso, para que puedan descubrirse. En mi metodología de enseñanza cruzo neurociencia, prácticas de yoga y mi propia exploración artística. Me apasiona acompañar a los alumnos en sus propios descubrimientos y caminos creativos.
• Publicaste dos libros con V&R Editoras, Los sueños de Luna y La magia de Luna, ambos para colorear. ¿Cómo fue tu experiencia de producción editorial?
En 2016 y 2017, cuando apenas había sido mamá, saqué dos libros de artista, para colorear. Fue todo un desafío, tenía todas las energías puestas en maternar. Los libros se pueden conseguir en toda Latinoamérica y en Miami. Me permitió llegar a todo un mundo de personas.
• ¿Cuáles son tus principales consejos para las personas que quieran empezar a dibujar y hacer sus propias obras?
Que en el “hacer” se van a ir descubriendo. No solo en el sentir, o en las ideas. Son cosas que hay que plasmar en forma de dibujos, murales, pinturas, esculturas. Y que sean parte de la comunidad, que compartan y se expandan a través del contacto con personas que están en la misma búsqueda.
• ¿Y tus próximos proyectos?
Me encantaría sacar algún otro libro, tal vez más escrito, vinculado con la creatividad. También otro con ilustraciones para niños, tengo varios proyectos y me encantaría publicarlos.
Mis últimos trabajos fueron los murales y los cursos. Y ahora, desde que estamos más en casa, estoy vendiendo muchos cuadros por encargos, a través de mi tienda online.
Por Victoria Villalba, para Untable Magazine
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